Sin debate en Internet

AL FINAL, como era de esperar, no habrá debate en Internet (snif).

Al parecer, todos los intentos por realizar lo que se ha dado por llamar un tercer debate, han sido infructuosos. La suma de las fuerzas ha sido equivalente a cero. Nada nuevo bajo el sol resplandeciente que ilumina nuestro devenir en el día a día de la actualidad en un plano de política ficción abonado al tira afloja del contínuo dime direte mediático, lo que propicia que el gobernante titiritero se desenvuelva como pez en el agua y exhibiendose majestuoso, mientras el candidato Rajoy mantiene su rostro circunspecto, al menos en apariencia. Pero la simple idea fue bonita mientras duró, habrá quien se diga hacia sus adentros. Pues si. Algo así como un sueño efímero del que te despiertas para volver a dar con la cruda realidad que nos ocupa y preocupa.

MENCIÓN A PARTE para la comedia a la que presumiblemente se han abonado algunos periodistas y responsables de medios de comunicación (digitales o no). Tiene gracia eso que he leido en alguna parte de "a pesar de los esfuerzos de Arsenio Escolar..." como si todo el peso de la iniciativa hubiese recalado en él, si bien es cierto que la idea de proponer un debate abierto en Internet entre Zapatero y Rajoy surgió de la redacción del periódico 20minutos.

Pero, ¿acaso ha movido el papi Escolar un dedo más de lo que lo haya hecho cualquier plebeyo internauta desde su humilde punto de conexión a la red de redes? me temo que si la iniciativa no ha prosperado no ha sido porque "a pesar" de los esfuerzos de Escolar no haya sido posible concienciar a los dos candidatos que aspiran a la presidencia del gobierno, sino que habrá sido "a pesar" de la implicación de los internautas, "a pesar" de la comunión de los medios digitales que han ido sumándose al respaldo de la propuesta, y "a pesar" de la contribución de mucha gente que, desde el anonimato de su blog, o desde la identidad de su correo electrónico, ha actuado en beneficio de la iniciativa con la ilusión de que prosperase, sin ánimo alguno de protagonismo, personas cuyos nombres permanecen a la sombra de algunos lumbreras que dirigen periódicos.

Gracias por todo, Arsenio, pero estoy convencido de que usted podrá sobrevivir sin recibir más palmaditas en la espalda. Y nosotros, la plebe, qué duda cabe de que podremos seguir capeando el temporal sin el paraguas de un debate "cara a cara" electoral en Internet, e incluso sin el amparo de nuestros gobernantes, en Catalunya y en España, amén de sonoras llegadas de un AVE politizado y tormentosas Elecciones generales a la vista.